Pánico

Estaba yo paseando a mi perro, un pastor alemán, el año pasado, cuando la calle se quedo sin luz y noté que mi perro se estaba poniendo nervioso. Cual fue mi sorpresa cuando aparecieron a lo lejos dos cuerpos de un tamaño considerable acercándose a la par, se trataba de dos rotwweilers, ya sabéis esos perros que aparecen en todas las películas como el perro del malo. Automáticamente mi corazón se puso a mil, me quedé paralizado sin saber que hacer. Estos dos perros se pusieron a dar vueltas en círculos a nuestro alrededor mientras se producía una ingente cantidad de ladridos y miradas. Yo me refugiaba detrás de mi perro sujetándole con la correa, porque el muy valiente estaba dispuesto a lanzarse contra ellos dos él solo y más que nada si lo soltaba me quedaba totalmente desprotegido ante aquellas dos bestias. Cuando la cosa estaba todavía más tensa y empezaba a temerme una furiosa batalla apareció como por obra de magia un coche por la carretera que se lanzó hacia los otros dos perros y consiguió ahuyentarlos.

Así concluye el relato de lo que me sucedió.